A la hora de seleccionar candidatos para un puesto de trabajo, los expertos en recursos humanos se interesan especialmente por las personas que demuestran unas habilidades especiales, que les hacen destacar como profesionales. Se trata de las competencias y actitudes necesarias para integrarse con éxito en un entorno laboral.

En los talleres de orientación explicamos la importancia de trabajar estas habilidades, conocidas como “soft skills”. Algunas de las más valoradas son:

  • Compromiso: Se buscan personas comprometidas con lo que hacen, que trabajen por alcanzar metas y objetivos.
  • Flexibilidad: Estar dispuesto a aprender, a cambiar de funciones y a adaptarse a cada nueva situación de la organización.
  • Creatividad: Innovar y proponer nuevas formas de hacer las cosas es un requisito para los profesionales del siglo XXI.
  • Iniciativa: Las personas emprendedoras, capaces de hacer las cosas por sí mismas, están muy bien valoradas en las empresas.
  • Trabajo en equipo: Es importante buscar el bien del grupo y tener una actitud colaboradora y solidaria.
  • Resolución de problemas: Ante situaciones complicadas hay que analizar todas las alternativas con serenidad y buscar la mejor solución.